Un somier es un soporte formado por un bastidor metálico o de madera sobre el que se encajan de forma transversal una serie de láminas de madera u otro material.
Como siempre decimos desde Grupo Lampier, todo o casi todo estaba inventado antes. El somier lo utilizaban los griegos con tiras de cuero atravesadas donde se colocaba la hierba. Los romanos también utilizaban este artilugio para varios menesteres.
Una base tapizada es un tablero acolchado y forrado de tela, que al igual que el somier sirve para apoyar sobre él nuestro colchón.
Cuando vamos a comprar una cama, es decir, colchón y somier o base tapizada, nos encontramos con la duda de cuál será mejor o cuál nos vendrá mejor.
Vamos a intentar desde Grupo Lampier ayudarte en esa elección.
Debemos saber que un somier se adapta por norma general mejor gracias a la flexibilidad de las láminas, y las bases tapizadas proporcionan mayor firmeza al colchón.
Si compramos un colchón viscoelástico y de látex lo mejor será que compremos un somier de láminas estrechas porque deja que el aire entre y el colchón se airee y ventile, mientras que la base tapizada lo que hace es ahogar y no dejar pasar el aire. El somier depende del número de láminas que tenga y de lo anchas que sean éstas para proporcionar mayor firmeza al colchón. Cuantas más láminas y más anchura tengan, mayor firmeza darán a éste.
A la hora de decantarnos por un soporte u otro, siempre debemos pensar en nuestro descanso y en que nuestro cuerpo adquiera la mejor posición a la hora de dormir, para evitar problemas de espalda.
Si se elige un somier de láminas de madera, los mejores son los de madera de haya que son de buena calidad y la durabilidad es mayor que los que están fabricados con tableros. Si nos decidimos por un somier de láminas metálicas, éstas pueden ser de aluminio o de hierro. La ventaja que tienen los metálicos es su precio y ofrecen la misma prestación que los de madera. Las ventajas de las láminas de madera son la elasticidad y la durabilidad, aunque el precio sea mayor que el somier metálico.
Si en cambio, nos decantamos por una base tapizada, hay que tener en cuenta que la tapa sea firme y realmente transpirable, es decir, que esté fabricada con materiales que dejen que el colchón respire. Las patas es otro punto muy importante a tener en cuenta, ya que cuantas más patas tenga más firmeza y estabilidad proporcionará ya que es el refuerzo de la base. Pueden ser de tala o polipiel. Si es del último material hay que fijarse en su centro que debe ser de un material que transpire.
Otro punto a tener en cuenta a la hora de elegir entre somier o base tapizada, es el grado de humedad y ventilación que tenemos en la habitación donde vayamos a colocarlo. Si no hay humedad y nuestro colchón es de muelles, podemos comprar cualquiera de ellos siempre que el somier sea de láminas anchas. Si nuestro colchón es viscoelástico deberíamos elegir un somier, que sea de láminas estrechas si queremos blandura o de láminas anchas si queremos dureza. Si nuestro colchón es de látex, elegiremos un somier de láminas estrechas para la transpiración.
Un somier con láminas espaciadas unas de otras, hace que el colchón quede sin soporte en algunas partes y que se puedan llegar a deformar o a hundirse. Las bases tapizadas aparecieron como solución al somier en cuanto a sufrir hundimientos y deformaciones, para garantizar un buen descanso y confort. Al ser uniforme hará que el colchón no se deforme.
El único inconveniente de las bases es el material que sea transpirable o no. Años atrás esto representaba un grave problema, pero hoy por hoy existen bases cuyos materiales son muy transpirables. Los materiales que mejor transpiran son para las bases tapizadas son tejidos tridimensionales con patrón de panal de abeja, que permite la aireación óptima para los colchones. Si la tapicería de la base es polipiel nos facilita la limpieza de la misma.
Sea un somier o una base tapizada deben soportar un peso de 120 kilos si son individuales y 180 kilos si son dobles o de 150 cm. La longitud de los mismos no es lo importante sino el soporte de peso.
Así que lo primero es saber qué colchón tenemos o qué colchón nos viene mejor en caso de que tengamos que comprarlo. Dependiendo de esto, así compraremos un somier o una base tapizada.
De una u otra forma es conveniente cambiar de colchón y soporte cada diez años para que nos faciliten un buen descanso. Son muchas horas las que pasamos en ellos y debemos cuidar nuestra salud y bienestar.
Hace años no se le daba tanta importancia al descanso ni a qué tipo de cama teníamos. Es verdad, que no había mucho donde elegir y la oferta era muy limitada. Pero hoy en día sabemos la importancia de un buen descanso en nuestra salud e incluso felicidad, nos conocemos más y mejor y por otra parte hay una gama inmensa donde elegir aquello que necesitamos para hacer de nuestra casa un verdadero hogar.
Somier o base tapizada para nuestro colchón; productos de calidad que podrás encontrarlos en Grupo Lampier y donde verás mejorados notablemente tu confort y descanso diarios y en general tu calidad de vida. ¡Consúltalos y no te quedes sin el tuyo!